Es notorio el profundo castigo que la crisis ha propiciado a un sector tan cíclico como el automóvil. Valga recordar que en España las ventas se han reducido a la mitad, desde 1,6 millones en 2006 a 820.000 turismos matriculados que se calcula para final de año. Pero las secuelas de la recesión también se han dejado notar en un profundo cambio en los hábitos de consumo.
Un síntoma de esta nueva mentalidad es la irrupción con fuerza de los vehículos menos contaminantes que se han convertido en las estrellas del mercado. Si en 2008 los vehículos que emitían menos de 120 gramos por kilómetro suponían un poco menos del 20% del total de las ventas, entre enero y agosto de este año han concentrado el 36,8% de las matriculaciones de los turismos y todoterrenos, según las cifras del Instituto de Estudios de Automoción (IEA). Lo que implica que de las 568.354 unidades vendidas en este periodo, 209.423 emitían por debajo de este límite.
Por contra, el porcentaje de los más potentes -los que expulsan a la atmósfera por encima de 200 gramos- se ha reducido a la mitad desde el 5,36% del total de matriculaciones de 2008 al 2,32% de este año. En cifras, 13.218 unidades en los ocho primeros meses de este año frente a 47.329 vendidos en el mismo periodo de 2008. Sin embargo, a pesar del fuerte tirón de los coches más ecológicos, la mayoría de las ventas, el 50,17%, se concentra en el segmento de modelos que emiten entre 120 y 160 gramos. El 10,4% restante lo ocupan los vehículos entre los 160 y los 200 g/km.
Y es que en estos cuatro años de crisis, con una caída conjunta de las ventas del 35%, solo han crecido -concretamente el 22,3%- los coches que emiten por debajo de 120 gramos. El resto de segmentos en función de emisiones ha descendido. Así, los coches entre 120 y 160 g/km matriculados desde 2008 han caído un 42%; los que se encuentran entre los 160 y los 200 gramos han padecido un descenso del 65% y los de más de 200 g/km se han derrumbado un 72%, según los datos de IEA. Estas variaciones explican por sí solas el fuerte aumento de cuota de mercado de los más ecológicos.
Libres de impuestos
Varios son los factores que explican el atractivo de estos coches, más allá de la conciencia ecológica de los españoles, difícil de cuantificar. El precio es un poderoso imán, pues los coches ecológicos generalmente se relacionan con los de menor potencia y, por tanto, más baratos.
Además, la exención fiscal en el pago del impuesto de matriculación de los vehículos que emiten por debajo de 120 gramos supone un abaratamiento que les aportan un atractivo añadido.
De hecho, el incremento de las ventas de estos modelos implica una caída de la recaudación de las comunidades autónomas, gestoras de esta figura impositiva transferida.
Sin embargo, el precio no lo es todo. Mayor repercusión ha tenido el avance tecnológico de los motores de combustión -tanto diésel como gasolina-, mucho más eficientes en consumo y, en consecuencia, menos contaminantes. Las nuevas versiones de muchos modelos que antes se situaban por encima del límite, hoy disfrutan de la exención tributaria al rebajar sus emisiones manteniendo prestaciones. Por contra, los coches eléctricos e híbridos apenas han contribuido al tirón de los ecológicos dada su escasa penetración en el mercado. Entre enero y agosto se vendieron 197 turismos eléctricos y 6.738 híbridos.
Fuente: Diario Digital Cinco Días (03/10/2011).